Me miraban desde lo alto, esperaban a que la oscuridad les diera brillo. Decidí sacar la caja desbordante de recuerdos.
—Ya, basta de guardar estas palabras, imágenes y sensaciones—
Incinerar rápidamente aquel atajo de objetos emocionales, transmutarlos en cenizas que habrían de disiparse al viento... Prenderles fuego, si. Pero la gasolina había subido de precio, así que fui por leña al bosquecillo, mas cuando volví, alguien había robado la caja de recuerdos.
20140102
Incendiar la caja de los recuerdos...
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